Tres defensas, tres goles y tres puntos para el Real Madrid (1-3)

El Real Madrid se llevó los tres puntos de El Sadar tras vencer a Osasuna en un partido en el que Zinedine Zidane recuperó la defensa de tres, con Marcelo y Danilo como carrileros. Cristiano Ronaldo adelantó a los blancos y Sergio León empató antes del descanso. Isco hizo el 1-2 ya en el segundo tiempo y Lucas Vázquez sentenció en los últimos instantes del tiempo añadido.

• ASÍ LO VIVIMOS: Osasuna 1 – 3 Real Madrid

Cuando se recurre al manido ‘en estos campos se ganan Ligas‘ lo que se quiere decir, en realidad, es ‘hemos hecho un partido terrible, nos ha podido pintar la cara un equipo muy inferior, pero hemos sacado los tres puntos’. Un eufemismo al que no le falta razón, ya que al final lo que importa es el casillero. Osasuna no fue superior al Real Madrid ni mereció la victoria, pero sí compitió de tú a tú al conjunto de Zidane durante un buen tramo del primer y del segundo tiempo. Al final, se impuso el poderío de la plantilla merengue.

Como ya hiciera en el Sánchez-Pizjuán, el técnico francés rescató un sistema cuyas pruebas parecían inconcluyentes. Sergio Ramos, Varane y Nacho ocuparon la zaga, mientras que Marcelo y Danilo debían estar más despejados como carrileros. Esa era la hoja de ruta, claro. La ejecución, sin embargo, tuvo sus imprevistos. Tras un inicio bastante serio de los visitantes, una jugada en campo merengue dejó helados a ambos conjuntos. Isco corrió a por un balón al espacio, Tano intentó obstruir al malagueño y el choque acabó partiendo la pierna del futbolista rojillo. Una imagen sobrecogedora que se quedó grabada en la retina de los jugadores.

No hubo reacción hasta cerca de la media hora de juego, cuando Karim Benzema (el mejor en el primer tiempo), se inventó una gran asistencia entre dos defensas para que Cristiano Ronaldo recibiese en el área, escorado a la banda derecha, y le pegase duro al primer palo. A Sirigu, que debía tapar la zona, se le coló el balón por debajo de las piernas.

Poco duró la alegría al conjunto merengue, que vio como en el minuto 32 quedaba neutralizado el tanto del portugués. Fuentes lanzó un balón largo a la espalda de la defensa madridista, ninguno pareció dar suficiente importancia al envío y Sergio León, pillo como él solo, se coló entre todos para recibir y plantarse ante Keylor Navas en solitario. Sabedor de que se podía ganar un gran contrato y alguna que otra portada o reportaje, apostó por la delicatessen y batió al tico con una vaselina.

La reacción visitante llegó en apenas tres minutos, cuando Karim Benzema enterró su buena actuación y volvió a alimentar el debate de la delantera. Cristiano Ronaldo quiso devolverle el favor con una asistencia desde la derecha, dejándole el balón cerca del área pequeña para que empujase a placer, pero el francés remató a las manos de un Sirigu que se lanzó como un felino al suelo. La intervención del italiano es meritoria, sin duda, pero el nueve tenía tiempo y espacio para haber buscado otra resolución.

Llegó el descanso con máxima igualdad y Osasuna intentó desnivelar la balanza nada más arrancar el segundo tiempo, pero no tuvo fortuna. Sergio León quiso coronarse al recibir en la banda derecha, encarar a Sergio Ramos, driblarle hacia dentro y buscar el golazo por el palo largo. Keylor Navas se lo impidió con una mano de libro y ahí se acabó el partido local. Fue la última ocasión del conjunto rojillo, que poco a poco fue perdiendo metros y batallas en el encuentro.

No tardó mucho en llegar el tanto de Isco, que escenificó la decadencia de Benzema en el partido. El francés recibió en el área, intentó progresar entre tres defensas y se cayó al suelo. No, no hay polémica posible. Se cayó. Para fortuna merengue, el malagueño apareció raudo y veloz desde atrás para cazar el balón muerto antes que nadie, progresar con ese caminar de alquimista y clavarla en el segundo palo con un sutil toque.

A partir de ahí, el encuentro pasó a manos de un Real Madrid al que tampoco le interesó un ritmo endiablado. El miércoles hay Champions League, la terrorífica racha del Nápoles da pavor y tocaba reservar todas las fuerzas posibles. Entraron Lucas, James y Kovacic; se marcharon Benzema, Isco y un lesionado Danilo, que se llevó un doloroso e innecesario pisotón por parte de David García, al que la lesión de Tano no pareció sensibilizarle.

El encuentro pudo sentenciarse bastante antes si el colegiado hubiera señalado alguno de los penaltis que sufrieron Cristiano Ronaldo y Lucas Vázquez, pero no fue necesario. El canterano merengue acabó llevándose el botín en el minuto 93, colocando una vez más en el liderato de LaLiga a un Real Madrid al que no le afectó verse momentáneamente por detrás del FC Barcelona.

Ficha técnica

ONCE DE OSASUNA: Sirigu; Tano (David García, 15′), Vujadinovic, Oier, Fuentes (Clerc, 52′); Causic, Tienza (Loé, 60′), Berenguer, Romero, Sergio León, Riviere.

ONCE REAL MADRID: Keylor Navas; Danilo (James, 56′), Nacho, Varane, Ramos, Marcelo; Modric, Casemiro, Isco (Kovacic, 87′); Cristiano y Benzema (Lucas Vázquez, 71′).

Goles: Cristiano Ronaldo (25′), Sergio León (32′), Isco (62′) y Lucas Vázquez (93′)

Árbitro: Iglesias Villanueva. Amonestó a Fuentes (9′), Modric (27′), Fausto (36′), James (60′), Causic (90′)

Estadio: El Sadar.

Twitter: @NJSaez