Mariano impide que se ‘repita’ la Primera en el Bernabéu (5-3)

Mariano impide que se ‘repita’ la Primera en el Bernabéu (5-3)

16/08/2016 0 Por Alba María Romero

El Real Madrid se impuso de manera contundente al Stade de Reims en el Trofeo Santiago Bernabéu. Aunque fue el club francés el que comenzó por delante en el marcador, los blancos, cuajando un buen partido en ataque, lograron darle la vuelta, a pesar de los errores defensivos. A punto estuvo de repetirse el marcador de la Primera Copa de Europa, pero Mariano en los minutos finales se encargó de impedirlo.

“Es el trofeo que honra al mejor presidente de la historia del Real Madrid”, en palabras de Florentino Pérez durante el discurso que daba la bienvenida a Marco Asensio. Y así lo hizo, en el duelo que intentaba reeditar la primera Copa de Europa del club blanco. Sin embargo, no fueron los galácticos –con cada vez más españoles entre ellos-, los que comenzaron por delante en el marcador.

A pesar de que Asensio, que cuajó unos 45 minutos espléndidos, dio el pase de la muerte, Bale no llegó a empujarla por los pelos. Los aficionados en un Bernabéu con demasiados huecos teniendo en cuenta el precio de las entradas –en lo que también influyó que el duelo se jugara un martes a las 22:30h-, ya empezaban a levantarse de sus asientos, con ganas de celebrar por fin un gol.

Y el gol tardó en llegar solo siete minutos, pero fue del Stade de Reims. Tras un error de Kroos en el mediocampo, el club francés montó un contragolpe de libro. Ramos tampoco llega a detener a Chavarría, que cruza el disparo, haciendo nula la estirada de Kiko Casilla.

Foto: realmadrid.com

Poco le duró la alegría. Tan solo cuatro minutos después, Kroos cuelga el balón desde la derecha al que no llega Gareth Bale, pero sí Nacho, que estuvo exponencial tanto en defensa como en ataque. El central, sin marcaje, se elevó para mandar de cabeza el esférico al fondo de la red, batiendo a Carrasso. Aún tendría ocasión de anotar el segundo rozando el ecuador del partido, pero esta vez no el guardameta estuvo más acertado.

Tras un dominio apabullante del Real Madrid en el que el Stade de Reims solo rompió la monotonía con algunas intentonas que siempre pudieron controlar los blancos, los pupilos de Zidane continuaban generando peligro: ya fuera Danilo con disparos desde fuera del área, Bale en posición de ‘9’ puro o montando las jugadas tras campar a sus anchas por toda la zona de tres cuartos –como en Gales-, o Marco Asensio con caño incluido, dieron trabajo a Carrasso, que apenas pudo tomarse un respiro.

Pero no fue otro que el de los goles en el 93’ el que anotó el segundo. Tras una gran jugada de Kroos en la que se metió hasta la cocina, errando porque quizás debería haber optado por disparar antes, Marcelo la mandó fuera, salvando un córner. James puso un auténtico caramelito que Sergio Ramos mandó de cabeza al fondo de la red.

Y cuando el Stade de Reims estaba a punto de emprender el camino a la caseta, llegó el tercero, el primero de Álvaro Morata esta pretemporada. Fue Gareth Bale el ‘culpable’ de medio gol, tras aprovechar todo el terreno libre para pisar área, frenarse en seco y dejar un balón raso al ex delantero de la Juve, que no falla en la definición y deja el 3-1 para mandar el partido al descanso.

Foto: realmadrid.com

Como si de un déjà vu se tratase, el Stade de Reims comenzó la segunda parte repitiendo el guion de la primera, y volvió a encontrar portería, mediante Oudin. Tras una jugada de peligro que duró más de lo que Zidane hubiera deseado –que no dejaba de dar indicaciones desde el área técnica-, pero el jugador del conjunto francés,a trompicones, terminó anotando el segundo que acortaba distancias.

James, aprovechando los minutos que le ofreció Zidane en este duelo, marcó uno de esos tantos que tanto se repitieron en su primera temporada en el club. Viendo libre la diagonal hasta el portero, anotó un disparo desde la frontal del área que hizo que el Bernabéu estallara en júbilo.

El Stade de Reims, en un intento de calcar el marcador de la primera Copa de Europa blanca, hizo el tercero mediación de Kiey, pero Mariano se encargaría de que el resultado fuera más abultado. Aunque el primer tanto, en el 77, se lo anularon por fuera de juego claro, haciendo que la celebración en el córner se quedara en anécdota, tres minutos después volvió a ver portería, esta vez de manera legal.

Con todo decidido, aún Mariano se atrevió a seguir encarando, demostrando a Zidane que debe apostar por él a pesar de que tener minutos en el primer equipo es bastante complicado. Así, el Real Madrid se despidió de su público en el primer partido de esta temporada en casa, dejando espectáculo, muchos goles y trabajo por hacer en defensa.

Twitter: @alba__23