El Madrid habla en el campo (4-1)

22/01/2012 0 Por Néstor Sáez


El Madrid hizo balance de daños y consiguió salir vivo de uno de los encuentros más complicados del campeonato, tanto por el rival como por el clima. El Athletic de Bielsa mostró su mejor versión en la primera mitad, adelantándose por mediación de Llorente, pero Marcelo, Cristiano transformando dos penaltis y Callejón hicieron sucumbir a los vascos. De Marcos fue expulsado y la afición pitó los cánticos favorables a Mourinho lanzados desde el fondo sur.

A Mourinho le gusta jugar con fuego. De hecho, se le podría entrever un complejo de pirómano oculto. Desde que pisó Inglaterra con el Chelsea, y sobre todo en su paso por el Inter, al portugués le ha encantado vivir siempre en un caos absoluto provocado por él. Un caos en el que se desenvuelve como nadie y en el que sabe erigirse como el vigía y salvador de su club. No obstante, en España se ha encontrado con que él no es el único que provoca el caos. Desde su propio vestuario hasta la prensa en teoría afín, el Madrid se ha convertido en una vorágine imparable de la que muy pocos logran escapar con vida imponiendo su filosofía sin dejarse influenciar. Y Mourinho está quizás en el momento más duro y comprometido desde que pisó Madrid. Había morbo por ver cómo reaccionaría el Bernabéu ante sus jugadores tras el clásico del miércoles y, en especial, tras la portada publicada por el diario Marca esta mañana. De nuevo, a vueltas con la ruptura del vestuario, los conflictos entre portugueses y españoles… Lo cierto es que el público madridista actuó con cautela. No se mostró enfervorecido en ningún momento ni tampoco recriminó a los suyos ninguna acción. Testimonial, silencioso, hasta pulcro. Como siempre, todo sea dicho.

Con Granero y Alonso en la medular como gran novedad, y Varane de nuevo en el centro de la zaga junto a Ramos, Mourinho recuperó el once tipo con el que ha logrado ser líder a cinco puntos del Barcelona. Entró Kaka’ por Di María/Callejón y Arbeloa por Lass en el lateral derecho. De todas formas, los primeros minutos del encuentro fueron para un Athletic que con De Marcos, Ander e Iturraspe en la medular, fue el primero en hacer acto de presencia. Poco a poco los de Bielsa fueron replegándose y cediendo la pelota al Real Madrid, aunque de manera inteligente. Los leones optaron por cambiar el discurso y recurrir al contraataque. Tras varias intentonas tímidas de Granero y Cristiano, Llorente abrió el marcador dándole de su propia medicina a los blancos. El delantero remató llegando desde atrás un centro magnífico de Javi Martínez desde la banda derecha. Peor no se podía poner la situación para el Madrid. El gol dejó a los blancos en un estado irreconocible. Se mostraron abatidos, confusos y erráticos. Tan solo Özil y Kaka atinaban a guiar unas ofensivas que acababan perdiéndose en la defensa vasca. En pleno desconcierto, De Marcos tuvo el 0-2 al encontrarse un rechace de Casillas con la portería a placer. El centrocampista no logró enganchar el balón y falló con estrépito. Fue a partir de entonces, pasados los 20 minutos de juego, cuando el Madrid despertó de su letargo y comenzó a jugar al fútbol. Tardó bastante en hacerlo medianamente bien, pero lo logró. Entre medias, Marcelo se sacó de la chistera una de sus internadas hasta la cocina combinando con Cristiano, Özil y Benzema hasta quedarse frente a Iraizoz y batirlo con maestría. Para los que no se pierden una, recuerden el gol del brasileño frente al Lyon en la pasada Champions y tendrán la imagen del que ha anotado hoy. El partido entró en un intercambio de golpes precioso para el espectador en el que los dos equipos tuvieron sus minutos de gloria. De Marcos y Llorente pudieron hacer el 0-2 (en especial el ariete internacional, aunque le pegó al suelo en un cara a cara frente a Casillas), mientras que Kaka’ y Cristiano hicieron sudar la camiseta a un Iraizoz completo. Mención aparte merece el ‘8’ blanco. El brasileño tiró de repertorio y mostró su cara más talentosa, brindando incluso ruletas al público. Sensacional Kaka’, buscando la titularidad para el próximo miércoles.

Para sorpresa de esos que buscaban un Bernabéu incendiado con el empate al descanso, la hinchada tan solo atinó a pitar a Mateu Lahoz, demasiado permisivo incluso para su estilo. La segunda parte se le puso de cara al Madrid desde el minuto uno. Fue entonces cuando el colegiado, quizás descontento con su actuación, pitó un riguroso penalti sobre Kaka’. El lanzador casi huelga decirlo. Cristiano mandó la bola a la escuadra y adelantó al equipo. A partir de ahí, el Madrid jugó plácido el resto del encuentro. El Athletic no supo manejar la desventaja solo creó algo de peligro a balón parado. Marcelo dio una exhibición por la banda izquierda, al mismo tiempo que Özil y Kaka’ pulían su juego conjunto y hacían fluir al del equipo. En esas, Özil se plantó en la frontal en el 65, recortó a De Marcos con maestría y este le zancadilleó cuando se disponía a batir a Iraizoz. El rechace fue a parar a Benzema, que hizo el 3-1, pero Mateu anuló toda la jugada y pitó penalti, expulsando con roja directa al defensor rojiblanco. De nuevo, Cristiano, sentenció con un impecable lanzamiento. Mourinho decidió mover el banquillo con el partido resuelto y dio entrada a Lass, Higuaín y Callejón por Granero, Benzema y Kaka’. Lo avisamos durante la retransmisión en directo desde Twitter y ocurrió casi de forma inmediata: Higuaín se escapó a la contra a falta de cinco minutos y el motrileño firmó el último tanto de la noche. La temporada de Callejón es para quitarse el sombrero. Ni en los mejores sueños de Mourinho hubiera lucido tan bien el canterano, que, por qué no, quizás sea titular el próximo miércoles. No hubo mucho más, el partido murió con algún que otro ataque ahogado del Madrid y con el Athletic desencantado por la crudeza del fútbol. Los de Bielsa se marchan a casa goleados tras firmar un partido más que correcto, sin perder en ningún momento la dignidad ni el estilo. El Madrid, con momentos de grandeza y otros de mediocridad, consigue apagar el incendio (si es que lo hubo) y mantiene la Liga a buen recaudo. La copa es harina de otro costal.

Twitter: @NJSaez