Maurizio Arrivabene revoluciona Ferrari

El nuevo ‘mandamás’ de la Scuderia ha demostrado que no le tiembla el pulso a la hora de prescindir de nombres prestigiosos que no han estado a la altura durante los últimos años. Hamashima, Tombazis y Pat Fry han sido los últimos en caer del organigrama rojo para proyectos de futuro. El polvorín reinante en Maranello no invita al optimismo, al menos a corto plazo.

Se marchó Stefano Domenicalli y llegó Marco Mattiacci. Se fue Luca Di Montezemolo y Sergio Marchionne tomó su relevo. A Alonso se le acabó la paciencia y Ferrari convenció al tetracampeón Vettel para cerrar heridas. El círculo parecía cerrarse nuevamente con un Mattiacci que era destituido apenas 7 meses después de llegar a la jefatura del equipo. Pero no. Llega Arrivabene y con él no hay ‘vacas sagradas’ ni compromisos. Tan solo el interés de devolver a la escudería más laureada de la historia al lugar que le corresponde.

Nikolas Tombazis y Pat Fry dejan la jefatura de diseño y la dirección técnica para dejar paso a Simone Resta y James Allison en sus respectivos cargos. Precisamente, el británico es uno de los que se salva de la revolución del nuevo jefe. Quizás también porque es de los que menos lleva en el equipo (llegó en septiembre de 2013) y porque está avalado por su magnífico trabajo con los E-20 y E-21 de Lotus. Unos coches capaces de compatibilizar ritmo y cuidado de neumáticos en cualquier trazado del campeonato.

El último en caer ha sido el responsable de neumáticos, el japonés Hirohide Hamashima, que llegó en enero de 2012 tras ser director de desarrollo en Bridgestone. Otros cambios que ha anunciado Ferrari para su nuevo organigrama son las incorporaciones de Lorenzo Sassi, que acompañara a Mattia Binotto en el trabajo con la unidad de potencia, y el nombramiento de Massimo Rivola como director deportivo. Además, destaca que el conocido periodista de Sky Italia y RAI, Alberto Antonini, se ocupará del departamento de comunicaciones.

Y cómo no. El cambio de los cambios. Quizás el que más presión tiene ante sí por ‘culpa’ de su antecesor. Sebastian Vettel. El tetracampeón del mundo ha aceptado el que posiblemente sea el mayor reto de su carrera deportiva. Si ya hizo su trabajo llevando a lo más alto al mejor monoplaza durante cuatro años de dominio insultante por parte de Red Bull, ahora tiene entre manos reconducir la situación de una escudería que lleva más de un lustro sin brújula.

Para muchos, estos cambios estructurales debieron llegar antes. De los cinco monoplazas que ha pilotado Fernando Alonso, tan solo el F10 estuvo mínimamente a la altura tanto en crono como en carrera pese a ser el peor de los mejores. El piloto asturiano fue un parche de todas las carencias de los monoplazas italianos durante su etapa vestido de rojo. ‘Maquilló’ de alguna manera los malos resultados de sus compañeros consiguiendo casi el 70% de los puntos totales de la Scuderia.

La huella que deja tanto en el equipo como en Italia es enorme. Tanto es así que uno de sus mecánicos le despidió con estas palabras: “Entiendo que te vayas, pero tienes que ganar. Ahora márchate y demuestra lo que puedes hacer ahí fuera”. “Es extraño que un equipo te pida que ganes en otro sitio, no hay aparato que mida el cariño que he recibido”, replicaba el asturiano.

Pese a que la tónica general de la escuadra transalpina ha sido afectuosa, desde la institución se han transmitido algunos mensajes que denotan rencor hacia Alonso. “Lo siento por Fernando, pero Vettel es la opción correcta”, decía Montezemolo. Raikkonen, que finalizó el mundial a 106 puntos del asturiano ha declarado que “con Vettel habrá mejor ambiente”. Por su parte, el bicampeón español prefiere jugar a otra cosa: “Ferrari será muy fuerte el próximo año. Con el presupuesto que tienen deben ser los favoritos”, decía.

Alonso acostumbra a no dar puntada sin hilo cada vez que tiene un micrófono delante. Y más teniendo en cuenta la información publicada por la prestigiosa revista ‘Autosport’. En ella se revelaba que el Ferrari de 2015 era peor aún que el F14T en su primera fase de desarrollo. El proyecto ‘666’ (como lo han bautizado en Maranello) será el primer monoplaza diseñado íntegramente por James Allison. El hombre llamado a sacar a Ferrari de un bache que se ha prolongado esperpénticamente.

Otro de los últimos movimientos del ‘Cavallino Rampante’ ha sido el fichaje de Esteban Gutiérrez como tercer piloto. La llegada del mexicano ha sido catapultada por un acuerdo entre la Scuderia y América Móvil, empresa que tiene como máximo accionista a Carlos Slim, lo que demuestra que pese a que Ferrari ha perdido rendimiento en pista, sigue siendo el epicentro del ‘paddock’ en cuanto a negocios.

La salida de Fernando Alonso ha provocado un efecto dominó hasta ahora inédito en el equipo más laureado de la historia. Maurizio Arrivabene tiene la misión de remontar el vuelo de una escudería que vive de su leyenda, de sus colores, de su grandeza, pero que actualmente está lejos del sabor a champán y de la gloria que te da estar en lo más alto del podio.

Twitter: @borja_velasco8